30 March, 2011

Buscando un lugar donde esconderme

Y ahí sigo, dándole vueltas al mundo más rápido de lo que él lo hace solo. Dándole vueltas a los días buscando un refugio, un lugar donde poder esconderme, un sitio para gritar sin que me tomen por loca, un sitio donde llorar de verdad, sin preguntas ni porqués, sin nada y sin nadie...
Porque no tiene sentido, porque quiero correr y correr, porque me ahogo, porque me desaliento. No quiero seguir asomada a un mundo que sigue sin mí, que no se para pese a verme hundida, que no se detiene pese a ver la tristeza clavada en el tuétano de mis huesos, que avanza sin piedad, que sigue adelante pese a que yo le grito que se pare con la voz más honda que sale de mi alma rota. Pero no es suficiente. Sigo anclada al mismo día a día. Anclada, atada, hundida, desalentada pero siempre, siempre, en la oscuridad. Siempre, salvo en los momentos en que apareces y me besas, en los momentos en los que me abrazas, cuando me siento enamorada, cuando siento que me quieres, cuando sé que podría escaparme y tú me seguirías. Nuestros momentos.

No comments: